El CARE de Mairena como ejemplo de instrumentalización
política, de un PP incapaz de elaborar ninguna propuesta para los Mairener@s. Dos
años después de su mentira electoral, tenemos CARE.
El Centro de Alta Resolución de Especialidades
Médicas (CARE) ya está en marcha. El pasado día 14, después de diez años abre
sus puertas, para alegría de Mairena y
Viso. Las fotos de rigor de los políticos peperos, como en todo el proceso
llevado a cabo hasta su apertura, debe hacernos pensar como un edificio
sufragado íntegramente por l@ mairener@s, es utilizado como propaganda, a costa
de los impuestos de l@s Mairener@s. Es de los pocos edificios públicos en el que
la administración andaluza sólo equipa el edificio y los habitantes de Mairena
son los “pagadores” de este edificio con sus impuestos, a precio de oro.
La estrategia política para disimular la incapacidad para dedicar recursos públicos (que sí existen y deberían dedicarse a los asuntos importantes como la salud) tuvo como exponente la apertura del edificio del CARE para acoger las urgencias del Viso y Mairena en el inicio de la pandemia del COVID-19. De nuevo la Junta de Andalucía no dota de presupuestos, ni medios al edificio, siendo de nuevo l@s mairener@s los que tenemos que pagar la apertura temporal del edificio. Con esta medida se da auto-propaganda en plena pandemia del COVID-19 y elimina los servicios prestados por el centro de salud, todavía en vigor. La pandemia ha puesto en evidencia todas las vergüenzas del sistema capitalista. Pero sobre todo ha puesto de manifiesto la importancia de tener un servicio sanitario público y universal. Ya antes de la aparición del COVID eran frecuentes las largas colas de espera en el Centro de Salud. Con la pandemia, han sido miles de mairener@s los que han comprobado la imposibilidad incluso de ponerse en contacto con su médico de cabecera, dada la alarmante falta de medios, de personal y recursos, que venía padeciendo el municipio.
Pactado en principio como gasto conjunto de los ayuntamientos de Mairena y el Viso, el gobierno del PSOE encabezado por el entonces alcalde, Antonio Casimiro Gavira, decidió asumir el coste del proyecto al completo. El coste total fue superado ampliamente tras la realidad de las obras, con sospechas de impagos a empresas y trabajadores de Mairena. El resultado de esta gestión fueron unas arcas municipales con más de 17 millones de euros de deuda. El posterior gobierno popular de Ricardo Sánchez se hizo cargo del proyecto de finalización y mejora del centro, hasta la llegada del hoy alcalde, Juanma López.
En las elecciones locales del 2019 (14 de mayo), el PP de Mairena ponía como promesa electoral estrella la apertura del CARE antes de 2019: “EL CARE ESTARÁ FUNCIONANDO ANTES DEL PRÓXIMO AÑO
Hoy ha visitado Mairena del Alcor el Consejero de Salud de la Junta de Andalucía. Jesús Aguirre ha mostrado su satisfacción por el buen trabajo de terminación gestionado por el equipo de Juanma López.” arengaban desde su página de facebook, otra mentira más, como los 400 puestos de trabajo de las elecciones de 2014.
La pandemia en España ha evidenciado un estado fallido por la aplicación de políticas neoliberales. El proceso de deterioro se produce con los sucesivos gobiernos de PP y PSOE. Junto con las reformas laborales, que empobrecieron el panorama laboral hasta la precariedad, la creación de las ETTs, los contratos basura, etc, los servicios públicos fueron perdiendo también capacidad bajo la excusa de que era necesario el apoyo de entidades privadas para ayudar en la gestión de servicios que deberían ser públicos. Empobreciendo los servicios sanitarios y traspasando dinero público a empresas privadas se produjo el expolio progresivo de nuestra sanidad.. El caso más flagrante es el de Madrid, donde el gobierno de Ayuso ha esquilmado la sanidad pública reduciendo al mínimo la inversión y, en cambio, gastando cantidades enormes en proyectos absurdos como el Hospital Zendal o la privatización de la campaña de vacunación en lugar de contratar personal para los centros públicos ya existentes. Los servicios de salud estatales públicos -y los que ofrecen asistencia junto con el contrato laboral- se crearon en algunos países como respuesta a los sistemas sanitarios universales y gratuitos que existían en los países del bloque socialista (donde aparecieron por primera vez en el mundo). Una vez desaparecida la influencia de los países socialistas, el llamado Estado de bienestar quedó como único garante de los derechos de los trabajadores. Y ese Estado de bienestar se ha ido socavando poco a poco, restando capacidad pública y pasándola a intereses privados, limando poco a poco los derechos de las capas populares
Las peculiaridades españolas pueden seguir observándose si ampliamos la lupa a nivel municipal. En el caso de municipios como Mairena del Alcor, los mairener@s llevamos años esperando que se haga alguna inversión pública que mejore la vida de nuestros ciudadanos y aumente la vida de este pueblo. Es hora de remunipalizar los servicios que se prestan en Mairena. La residencia de ancianos, el sistema de recogida de basuras, las guarderías municipales y el nuevo tanatorio son claros ejemplos que con la con gestión pública se generará una mayor eficiencia en las políticas de calidad que sirven a los ciudadanos.
